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Un Mundo en 4D

2006 y sus 10 mejores aportaciones científicas. Por Tostadora

2006 y sus 10 mejores aportaciones científicas. Por Tostadora

 

 

    La revista Science ha publicado los diez grandes descubrimientos y avances científicos del año 2006. Desde la posibilidad de encontrarnos con el hombre invisible hasta el eslabón perdido entre los anfibios y los primeros vertebrados capaces de vivir absolutamente en tierra firme… Grandes hallazgos que ayudarán a comprender mejor nuestro entorno y a nosotros mismos (esto es lo que dicen todos los científicos cuando defienden sus proyectos para conseguir una subvención).

 

 

    Estos son:

 

 

1ª Resuelta la conjetura de Poincaré:

 

    Casualmente nuestro primer artículo del blog. Este problema estaba considerado como el problema matemático más complejo de este siglo y una de las diez cuestiones sin resolver del milenio. Es un problema de topología tetradimensional del espacio planteado hace cien años por Poincaré y que, como mucho, entienden de verdad una docena de personas en todo el planeta. Hasta que Perelman publicó la solución.

Parece ser que Perelman está considerado como la persona más inteligente del mundo. Le fue concedida este año la medalla Shields (algo así como el Nobel de matemáticas que, en contra de lo que muchos piensan, no existe), pero el ruso, que vive en un pequeño pueblo y que es poco amigo de los actos sociales (otros dicen que directamente es un ser completamente intratable), ni siquiera fue a recogerlo. Según Science, éste es el hecho más importante del año y será la “tabla periódica” que aportará claridad al estudio de los espacios tetradimensionales.

 

 

2º Viaje al centro del ADN fósil:

 

 

    La paleogenética es el estudio del ADN fósil. La amplificación, mediante ingeniería genética, de pequeñas secuencias de ADN de especies extintas está aportando un nuevo y complejo campo de actuación. Este año, 150 aniversario del descubrimiento del hombre de Neandertal, dos equipos de investigadores han conseguido, por primera vez, secuenciar mas de un millón de bases del ADN de esta otra especie humana que compartió con Sapiens 10000 años de historia.

 

 

3º Los hielos menguantes:

 

 

    Los investigadores han llegado a una preocupante conclusión: las dos grandes superficies heladas de la Tierra (Groenlandia y la Antártida) están perdiendo hielo a velocidades cada vez mayores. Enorme placas, del tamaño de países, se desgajan y vagan por los océanos hasta derretirse.

 

 

4º El eslabón perdido de los vertebrados:

 

 

    El “Tiktaalik roseae” es el eslabón evolutivo que une a los peces con los primeros invertebrados que vivieron en tierra firme, hace 375 millones de años. Cuerpo de terápodo cuadrúpedo pero con figura de pez y mandíbula de cocodrilo. Así eran nuestros tatarabuelos.

 

 

5º El largo camino hacia la invisibilidad:

 

 

    La Ciencia ha diseñado el primer y aún rudimentario traje invisible. Lejos de ser aún perfecto (la prenda, parecida a una gabardina, solo es invisible cuando es observada en determinadas condiciones) se basa en una revolucionaria manera de manipular las ondas electromagnéticas, obligándolas a “ignorar” al objeto, rodeándolo, y mostrando lo que está inmediatamente detrás de él.

 

 

6º Victoria contra la degeneración macular:

 

 

    La degeneración macular son “manchas” en la retina que en las personas mayores pueden llevar a la ceguera. Un nuevo fármaco, el “ranibizumab”, incrementa la visión de un tercio de los pacientes al tiempo que estabiliza a los demás.

 

 

7º El verdadero origen de las especies:

 

 

    Diversos estudios en 2006 han revelado que basta con cambiar el entorno en el que vive un grupo de individuos àra que se empiecen a producir los cambios genéticos que terminarán por convertir a sus descendientes en una especie diferente.

 

 

8º Hacia el “más pequeño todavía”:

 

 

    Los microscopios ordinarios no son capaces de mostrar objetos que sean menores que la mitad de la longitud de onda de la luz usada para iluminar (200 nanómetros para la luz visible). Durante años los físicos han intentado sortear esta limitación conocida como “Límite de difracción”. Lo consiguieron, finalmente, en abril.

 

 

9º Cómo consigue perdurar la memoria:

 

 

    Cómo el cerebro consigue grabar nuevos recuerdos es una de las cuestiones principales de la neurociencia. Una de las posibilidades implica un proceso llamado “potenciación a largo plazo” (LTP) que de alguna manera fuerza las conexiones entre neuronas y que es el auténtico mecanismo de la memoria.

    Por fin esto se ha conseguido demostrar. Estudios realizados este año refuerzan esta hipótesis. Uno de ellos consiguió demostrar que suprimir el LTP tras haber aprendido algo suponía olvidarlo por completo.

 

 

10º Manipulación genética:

 

 

    El descubrimiento de pequeñas moléculas de ARN capaces de desactivar genes es algo que se ha venido repitiendo durante los últimos años. Este 2006 no ha sido una excepción y un nuevo miembro se ha sumado al club molecular: PiRNA, que abunda en los testículos de humanos y animales y que sirve para regular el desarrollo y mantenimiento de las células espermáticas.

Parche para el capítulo II.V

Resulta que a nuestro licenciado favorito se le olvidó comentar el otro día a sus alumnos que los fenicios, que vivían en el oriente próximo, establecieron una de sus colonias más importantes en lo que ahora llamamos Túnez y la llamaron Qart-Hadash (Cartago) de ahí que los cartagineses fueran púnicos.

Os pido perdón en su nombre. Aunque he intentado convencerle para que sea él quien lo haga pero es demasiado orgulloso...

Primer mes. Primera encuesta.

Primer mes. Primera encuesta.

 El blog acaba de cumplir su primer mes de vida y poco a poco va cogiendo forma. Estamos intentando que todas las semanas se renueven los artículos, cosa que a veces es difícil porque nuestro interés consiste en que además de hablar de los temas que nos atraen, estén expuestos de manera interesante o, en el peor de los casos, de una forma amena.

Todavía nos quedan muchos palos por tocar. Pero antes de continuar nos gustaría conocer vuestras opiniones. Sé que hay bastante más gente de la que esperábamos siguiéndonos, pero también participáis mucho menos de lo que nos gustaría. Ese es el motivo de esta encuesta. Así nos podréis poner verdes todo lo que queráis... y de paso, si os da por hacer críticas constructivas, intentaremos mejorar.

Aquí os expongo las preguntas. Cuando las contestéis poned el número de pregunta y vuestra respuesta, al lado.

Gracias

 

1º. ¿Cuál es la nota (sobre 10) que le pondrías al blog?

2º. ¿Crees que consigue su objetivo? (Podéis contestar Si o No únicamente, aunque si queréis expresar los porqués de vuestra respuesta, mucho mejor).

3º. ¿Qué temas son los que más os gustan del blog?

4º. ¿Cuál el que menos?

5º. ¿Qué temas, generales o particulares, te gustaría que se tratara aquí?

6º. ¿Cuál es el artículo que mas os ha gustado? ¿Por qué?

7º. ¿Y el que menos? ¿Por qué?

8º. ¿Os gustaría que predominara más la opinión que la divulgación, o al revés?  

9º. ¿Con que frecuencia lees el blog?

             A. Todos los días

             B. Casi todos los días

             C. Una vez a la semana

             D. Cuando me acuerdo

             E. Es mi primera vez

10º. ¿Te gusta comentar los artículos? ¿Por qué?

11º. Si tienes algo que añadir, referente al blog. Coméntalo.

Siglo III a.C: ¿Quiénes son los púnicos? Cáp. II.V de III. Por Tostadora

Siglo III a.C: ¿Quiénes son los púnicos? Cáp. II.V de III. Por Tostadora

 

-Veamos ¿Quién sabe por qué los enfrentamientos entre romanos y cartagineses han pasado a la historia con el nombre de "Guerras Púnicas"?

-Profe, profe, yo...

-A ver Miguelito, dime.

-Pues se llaman "púnicas" porque los cartagineses son "púnicos".

-¿Y qué es un "púnico", Miguelito?

-Pues... eh....esto... mmm... ¿Uno de Cartago?

-Ay-suspiró el recién licenciado-, que duro es ser profesor de educación especial.

-Profesor, los de educación especial están en la clase de enfrente, esto es 2º de ESO.

-(Eso es lo que os hace creer el estado, pequeños bastardos...) Ejem, si, disculpad mi pequeño lapsus. Pues, como iba diciendo, antes de que el oligofrénico de vuestro compañero me sacara de mis casillas... La palabra "Púnico" proviene del griego "Phoinikoi", término que utilizaban los helenos para denominar a los fenicios. Aunque algunos ineptos mentales, como los que conforman la propia RAE -qué se puede esperar de un grupo que tiene entre sus filas a un escritor cuya documentación histórica para sus novelas la realiza su hija de 14 años-, insinúan que realmente su origen es latino. Pero bueno, si tuviera en cuenta todas las estupideces de semejante calibre entonces escucharía a mi mujer.

"Phoinikoi" es el fruto de la palmera, el dátil. Los fenicios se asentaban en la zona de las actuales Israel y Palestina, muy rica en estos frutos. Así que los griegos conocían a los que allí vivían como "dátiles".

-Profe, profe, -dijo Miguelito- ¿puede ser que les llamaran "dátiles" porque los de esa zona eran "renegríos" ?

-¡Albricias, albricias! ¡Una conexión neuronal en secundaria! Es el día más increíble de mi vida, Miguelito. Estoy a punto de considerarte como un ser superior a un australopitécido. Dios mío, estoy TAN emocionado...

-Profesor, Miguelito se ha quedado dormido encima de los apuntes con los ojos abiertos y le sale sangre por la oreja.

-Marcos, deja a Miguel que descanse. Se lo tiene merecido. Continuemos. Ya sabéis que los púnicos eran los fenicios. Pero los fenicios no se llamaban a sí mismos fenicios. El espacio que habitaban se llamaba Canaan y el nombre con el que se denominaban era el de "cananeos".

-Pero profe, ¿entonces por qué los llamamos fenicios? -dijo Marcos-.

-Buena pregunta, Marcos. Te voy a poner un positivo. Pues es muy sencillo, los latinos adoptaron el término griego "Phoinikoi" y lo transformaron en "Phoenicius". Os recuerdo, pequeños bastardos, que el sonido "Ph" se pronuncia como "F" aquí. El castellano proviene del Latín ergo "foenicius" derivó en nuestro idioma como "fenicio".

-Ohhhhh -la clase soltó un murmullo de admiración-.

-¡El profe ha hecho magia! -gritó Marcos- ¡Ha convertido una palabra en otra!

-No, Marcos. No es magia, es evolución. Un término que desconocéis porque tal vez vuestros genes no hayan sufrido semejante fenómeno en generaciones. Es lo que tiene la endogamia.

Sonó el timbre que indicaba el final de la clase.

Riiiiiiingggggg

-Profe, no he entendido casi nada pero me ha gustado mucho la clase de hoy y creo que a Miguelito también. Es una pena que ahora no pueda hablar para decírselo.

-Me alegro Marcos. Es posible que durante unas horas te duela la cabeza. No te preocupes, es normal, no estais preparados para esto.

-¿Preparados para aprender?

-No. Preparados para pensar.

 

Leyendo a Joyce desesperadamente. Por Tostadora

Leyendo a Joyce desesperadamente. Por Tostadora

 9:05: Acabo de despertarme y todavía tengo que desayunar y ducharme. Las 24 horas comienzan desde el momento en que coja el libro. Calculo que sobre las 10 es cuando comenzaré el reto.

10:10: Tengo delante de mí la primera página. "Majestuoso, el orondo Buck Mulligan...": Esta es la primera frase del libro. Tengo 24 horas para llegar a la última. He calculado que si duermo unas 5 o 6 horas y descanso mientras como, deberia leerme 68 páginas por hora. Esto es, más de una página por minuto.

Nadie dijo que fuese fácil.

11:00: Bien, ya veo a que me enfrento. Mi rival es un gigante que describe cosas rocisedosas, azulhumeadas, con algunos tonos blancoolas en un ambiente en el que existen esencias almizcleperfumadas. Golpea fuerte, pero yo soy un duro fajador. He perdido el primer asalto a los puntos pero estoy lejos de estar tocado. ¿La brecha en el ojo? Tengo otro, no os preocupeis. Creo que me la hizo cuando amagó con una descripción al uso y de pronto me di cuenta de que estaba dentro de un monólogo interior.  Me ha engañado este gran hijo de puta, pero aprendo rápido, chico. Las frases larguísimas en latín, ya me las esperaba y la jerga no ha supuesto un reto suficiente para mí como para que siquiera me alcances. 

Te he estudiado, jodido irlandés.

Quedan, 888 golpes por esquivar. 

11:35: Buscando un botón rojo. Da igual si pone "eject" o "self-destruction". Debo tenerlo localizado.

12:00: Un momento. Estoy en el suelo. Levántate, mierda. Abre al menos los ojos. Ya. Bien. Joder. Hay sangre. Es mía. Supongo que es mía. Mierda, mierda. Apenas tengo fuerzas para incorporarme. ¿Donde esta el ring? Esto es una puta selva, joder. Claro. Claro que es una selva maldito estúpido. Y esto es tu Vietnam. Soñaste lo del Ring y lo del gigante irlandés. Tú estás luchando contra los ejércitos de Ulises. Contra las 18 divisiones. Al menos estás vivo. Estás vivo. Joder estás vivo, malherido y vivo. Puto gigante verde. Los generales Nestor y Telémaco han caido, teniente, con todos sus hombres. Tú estás vivo. Jodido, pero vivo. La demostración algebraica de que el espectro de Hamlet es el abuelo de Shakespeare te ha dado, pero no ha acabado contigo. Siempre fuiste zurdo, no echarás de menos esa mano. Nunca tuviste espectativas de cogértela con la dos. 

Ahora, ¿qué has aprendido de tu enemigo? Irlanda es el único país que no persiguió a los judíos. Nunca los dejaron entrar.

Tengo que matar un ejército de 865 hombres con mis propias manos. 

13:00: Salí del bar y Proteo y Calipso estaban fuera. Esperándome. Hemos escuchado que eres un tio duro-dijo Calipso-, pero ese par de mamones que te has ventilado eran unos pringados. Pero pringados o no, eran nuestros primos. Pero nosotros no somos nuestros primos -añadió, hasta ahora callado, Proteo-.

Proteo me intentó golpear con contransmanificandjudeogolpancialidad. Saqué el diccionario y, con él, desvíe su ofensiva, que acabó golpeando contra una pared. El edificio se derrumbó.

Contransmanificandjudeogolpancialidad no aparece en el diccionario, querido Proteina. Simplemente no existe. El edificio que acabas de derribar tampoco. Ambos unicamente existen en mi mente. Y mi mente la controlo yo.

Encore deux minutes. Mirar al reloj. Tengo que. Fermé. ¡Hijo de perra! Pizcas todos kjrrrklek vuelven a su sitio.

Proteo se deshizo en una algarabía de humo. Ascendiendo, encontrando el Nirvana.

A Mary Bloom se le ha quemado un riñón en la sartén. Es mi riñón. Me lo ha robado Calypso y me ha cosido. No lo he sentido. Proteo no me ha vencido, pero me ha agotado. Calypso, gitano. Escucha el reloj. Cu-cuuu. Es tu hora. No hablas en francés. Te entiendo. Descifro tus pensamientos. Sé lo que vas a hacer. Ja. Chúpate ésta gitano, romaní. Vuela su escafoides. No sé donde está el escafoides.

Gano.

Persigo a 820 jeroglíficos de materia oscura, en una noche sin luna, en una habitación sin luz, que no están allí.

13:25: Le he dado con el codo. Al botón rojo. Le he dado sin querer, lo juro. "Eject" ponía. "Eject", de eyectar. De salir volando, de subir a por aire y caer en paracaídas. "Eject". Me ha devuelto una cinta, no debo leer cerca del video.

13:55: Descanso para comer. O vomitar. Son unas 267.000 palabras a las que me estoy enfrentando, con un vocabulario de 30000. Una persona culta maneja unas 2500 o 3000. Aunque de las 30000 muchas son mezclas de otras y se pueden ir, más o menos, descifrando.

Quedan 780 páginas llenas de palabras.

15:30: He comido con Egeria Teriyaki variado. Supongo que Joyce no sabía lo que era un Teriyaki. Seguramente tampoco conocía la palabra acondroplásico. David era acondroplásico y Goliat no. David el Acondroplásico bailó sobre la cabeza de Goliath.

16:00: Revisemos... Según los foros de internet, los estudios de universidades y las notas a pié de página es necesario para abordar el "Ulises" lo siguiente:

-Una guía de Dublín.

-Un diccionario de la RAE.

-Un diccionario ideológico.

-Tener a mano -es decir, en la misma mesa donde estas leyendo- toda la bibliografía de Joyce, así como la Odisea.

-Haberte leído todo lo anterior y, preferiblemente, haber memorizado extensos pasajes para así acortar las consultas necesarias.

-Ganas.

-Una cabeza dura como el adamantio -estoy Joyce tampoco sabe lo que es-.

De todo lo anterior sólo tengo el diccionario de la RAE y la cabeza dura. Pero como el reto es en 24 horas no puedo hacer muchas consultas, así que soy sólo una cerilla. Y de fósforo no ando muy bien. No como mucho pescado.

750 torturas me están esperando.

16:40: Un campo de gigantes desmembrados yace ante mí. Carne roja, tripas, sangre, bilis que me baña. Pero escucho temblar el suelo firme. A lo lejos diviso otra decena de gigantes, de mechas, de ángeles, de Gólgotas. Mucho mayores que los anteriores. No puedo huir, estoy herido y me darán alcance facilmente. El botón rojo de mi armadura no funciona. Soy un Buzz Lightyear que ha descubierto que es sólo un juguete. Pero cogito, ergo sum. La Res Extensa depende de mi Res Cogitans, decía Descartes. Pero mi cabeza es solo adamantio. El primero en llegar es Saturno. ¡Devórame, soy tu hijo! El que te reemplazará. Algún día me verás saliendo de tus entrañas. No puedes luchar contra el destino, Saturno. Por eso yo no lucho. 

Sólo espero.

739 guerreros me han matado.  

  

2 de Octubre de 2006: El gran desafío

 

Durante los últimos días habréis podido comprobar que el blog no se ha renovado. Esto se debe a que Egeria y yo nos encontramos en Sevilla disfrutando unas mini-vacaciones antes de incorporarnos a nuestras obligaciones universitarias (pocas, pero obligaciones al fin y al cabo).

 

            Además ha coincidido este viaje con un retraso en artículos que ya se habían comenzado a redactar. A mi me quedan los referentes a los romanos y a Egeria uno sobre P=NP con poesía -estilo chino- incluida. A partir de la semana que viene nos pondremos al día.

 

            Os preguntaréis a qué me refiero exactamente con el título de esta columna. Pues os cuento: He decidido abordar una empresa mayúscula, es más, yo diría que superlativa -like Gongora´s nose-. Me he propuesto leerme el "Ulises" de James Joyce en 24 horas. ¿Cuándo? El lunes 2 de octubre, aprovechando que ese día es de presentación en la facultad y no pensaba ir ya de primeras.

           

            Para que os hagáis una idea de la magnitud de mi empresa he de deciros que Egeria ha decidido leerse -por compasión- "La Odisea" -repito, POR COMPASIÓN-, en las mismas 24 horas en las que yo me voy a estar pelean... digo disfrutando de la literatura del genio irlandés. El "Ulises" está considerado como una de las lecturas más complejas y dificultosas de la literatura universal. Mi edición consta de unas 930 páginas, y pueden pasar más de cincuenta sin que aparezca un signo de puntuación. A todo aquel que se ha acercado alguna vez a la obra de Joyce y le hemos comentado este reto nos ha respondido lo mismo: "Yo no tuve cojones de terminarme el Ulises". Mi padre no pasó de la página 12.

 

            Pues mi desafío consistirá en leerme semejante ladrillo y terminarlo antes de 24 horas. Podréis ver mi evolución en la lectura visitando esta página. Escribiré un artículo que iré actualizando a cada hora, para comentar cuáles son mis impresiones, mi ánimo y -lo que supongo que más os importará- por qué página voy. 

 

Hasta el lunes.

Samuel Beckett bajo un prisma fractal. Por Tostadora y Egeria

Samuel Beckett bajo un prisma fractal. Por Tostadora y Egeria

El segundo refrito de esta serie es también un post que Egeria y yo elaboramos para el blog de Javier Sampedro. Éste había preguntado en su columna que cuáles eran los pensamientos y ensoñaciones de Samuel Beckett en la foto de la contraportada de “El País” el día anterior.                                                

La foto acompañaba un artículo de Manuel Vicent que comenzaba con la frase "Samuel Beckett nació en Viernes Santo y murió el dia de Navidad" y en el que se relataban diversos aspectos de la vida del escritor irlandés. Por ejemplo, después de estrenar “Esperando a Godot” –una obra de teatro que gira en torno a la espera de alguien llamado Godot pero que nunca aparece- todo el mundo le preguntaba a Beckett que quién era realmente ese tal Godot. El respondía que, si lo hubiera sabido alguna vez, lo habría plasmado en la obra. También hace Vicent referencia a que cuando él era joven se encontro al célebre escritor saliendo de un café de París y se le quedó mirando sin atreverse, siquiera, a acercarse. Y por último, otro episodio reseñable tiene que ver con uno de los diálogos escritos por Beckett que decía (más o menos) asi: 

Cliente: ¿Dios tardó siete días en crear el mundo y usted necesitó seis meses para terminar estos pantalones? 

Sastre: Bien, pues observe como va el mundo y ahora vea lo bien que le quedan mis pantalones. 

Pues de estos mimbres, el siguiente cesto, hecho al alimón: 

“Beckett dio el último sorbo a su taza de café y se dispuso a pagar la cuenta.  El camarero le reconoció y le dijo que estaba invitado. “En el Café Deux Magots no se cobra a los premios Nóbel”. El escritor sonrió. No solían reconocerle y menos en esa zona de París que no frecuentaba si no era realmente necesario. Cuando salió vio a un joven que le miraba fijamente. Beckett apartó la mirada. Ya llegaba tarde para hacerse el reportaje y sospechaba que, si se demoraba los segundos suficientes, aquel chico le asaltaría. 

En el coche, un dos caballos que utilizaba para mimetizarse con el ambiente parisino, empezó a albergar una sensación inquietante. Aquel gesto silencioso del joven, sin estridencias, con los ojos entornándose ante él como muestra de respeto, sin utilizar realmente la vista, escrutándole con el alma. Se sintió como una semilla. Como el patrón de un fractal, inculcando al chico una parte de él con su forma, una forma que puede florecer hasta el infinito. Que seguirá floreciendo después del silencio. 

Llegó al parque y se encontró con el fotógrafo. Seguía turbado. El fotógrafo le pidió que pasease por la arboleda hasta llegar a un punto concreto. Comenzó a andar con la mente en blanco. Ahora no podía pensar en nada. No sabía por qué, pero en ese momento tampoco le importó. De pronto tuvo un deja vú. Pero no era uno al uso. En referencia a que no era una sensación que se repitiera desde el pasado sino la semilla del fractal habiendo germinado en el futuro. Eran palabras, “Samuel Beckett nació en Viernes Santo y murió el día de Navidad…” Levantó la cabeza, mirando al chico. Ya no era joven. Había perdido parte del cabello y su piel presentaba las manchas de la madurez, pero su rostro no había cambiado. Era la misma mirada. 

Días después, sentado en un café, vio una de aquellas fotografías publicadas y le extrañó el gesto que presentaba en ella. Y recordó aquel momento. El momento en el que algo cobró sentido dentro del absurdo. El instante en el que el fractal había germinado. Y comprendió que no se encontraba solo en aquel paseo. Que el espacio que había a su lado estaba ocupado por aquella rama del fractal. Se dio cuenta de que aquel chico era un sastre, un tejedor que guardó su patrón para, 22 años después, confeccionar un traje para el resto de la eternidad. 

Al fin supo quien era Godot.”   

Profusión del bipartidismo en el Homo Sapiens o (lo que viene siendo) Ejercicio de Ego I. Por Tostadora

Lo que aparece en este artículo y en el siguiente es lo que se conoce vulgarmente como “refrito”. Este verano Egeria y yo participamos en el blog que el escritor Javier Sanpedro puso a disposición de los lectores de “El País” durante el mes de agosto. Cada día, en su columna, Sampedro proponía un par de enigmas relacionados con la ciencia que los bloggies tenían que intentar averiguar, discutiendo entre ellos o buscándose la vida por su cuenta y escribiendo sin hacer caso a las tendencias que los demás proponían.           

El primer día que escribí en él, los enigmas eran dos. El primero incitaba a buscar un nombre para un nuevo planeta. El segundo preguntaba acerca de los motivos por los que se produce el bipartidismo y nuestra tendencia a segregarnos en dos posiciones encontradas. Yo respondí a lo segundo y al día siguiente me encontré con que Sampedro me había nombrado en el periódico criticándome de forma muy positiva.            

Adjunto el escaneo de la crítica y el artículo que, creo, podría resultaros interesante –obviamente lo interesante sería el artículo. La crítica no tiene por qué pero, que queréis, cada vez que lo leo se me ponen los vellos de punta y los pezones en disposición para rallar cristales-:

15-08-2006

“Antes de nada me gustaría expresar mi asombro por el nivel de este blog... Es una gozada y la verdad es que me da hasta reparo exponer mis ideas debido a los conocimientos de los colaboradores.

En lo referente al bipartidismo, creo que no es una tendencia humana, sino simple y llanamente una experiencia occidental. En muchos países asiáticos sorprende la capacidad de nuestra civilización de buscar el por qué de las cosas. Su forma de ver la vida se basa más bien en aceptarlas que en entenderlas. No buscan una razón, ni ansían poseerla. Las cosas son como son y ya está.

Pero a la hora de buscar los motivos de las cosas, la tendencia humana es la del "blanco o negro". ¿Por qué? Por la tendencia natural del lenguaje a mentir. Pensemos en la escala de colores. 16 millones de colores que el ojo humano es capaz de diferenciar -bueno, la verdad es que sólo el ojo humano femenino. Yo no encuentro diferecias apenas entre el "marfil" y el "blanco" o entre el "cyan" y el "celeste". Yo como mucho solo soy capaz de expresarme en términos del tipo "marrón", para nombrar el marrón oscuro, y "marrón mas clarito" para referirme al "caqui"-.

Pero bueno, el caso es que tenemos un nombre para muchísimos colores. Pero  para otras cuestiones más abstractas solo tenemos tres o cuatro palabras. Pongo de ejemplo el amor... Aquellas personas que han tenido diversas relaciones podrán reconocer que por cada persona con la que han estado han albergado sentimientos diferentes. A dos personas diferentes no se las puede amar de la misma forma pero sí estamos acostumbrados a decir que a ambas las amamos. Utilizamos la misma expresión para sentimientos diferentes. Son parecidos, vale, pero no son el mismo y sin embargo los igualamos. Es típica la pregunta "¿De cuantas personas te has enamorado?" y que el otro responda más o menos rápidamente. "Tres" contesta. Él previamente ha identificado unos patrones que, si se cumplen, los llamará "enamoramiento" y si no los relacionará con las palabras "cariño" o "pasión". Pero ¿y el resto de patrones que le han sobrado de aplicar su propio concepto de "amor"? Tendemos a que para llamar a algo "X" debe cumplir una serie de condiciones. Por ejemplos las condiciones A, B y C. Y si lo que estamos evaluando presenta A, B, C, F, H y J lo adoptamos como "X" olvidándonos de la importancia que puede tener en el objeto y en nosotros mismos F, H y J. Es decir al buscar razones para las cosas, al intentar darles explicación, debido a la economía lingüística a la que solemos estar sujetos acogemos un término que "más o menos" englobe lo que queremos decir, olvidándonos de todos los matices que hacen de ese objeto o de tal sentimiento algo único y diferente. De ahí la tendencia al bipartidismo.

Por comodidad, las diferentes formas de ver el mundo en diferentes ámbitos van desapareciendo para, poco a poco, dejar solos a las posturas que han sido capaces de anexionar a las demás. Es como el "Big Crunch". La masa se va atrayendo formando cada vez elementos más grandes. Hasta que dentro de millones de años el universo será únicamente espacio y dos enormes cantidades de materia intentando atraerse la una a la otra. Una disputa entre dos dioses peleando por acercar al otro a su terreno. Y el que lo consiga otorgará su forma a todo el resto de materia universal, haciendo de ella un todo homogéneo, haciendo del universo un lugar inhóspitamente aburrido.” 

PD: No he conseguido acoplar la crítica, pero al menos os dejo un enlace aquí abajo. 

http://img227.imageshack.us/img227/4773/escanearyk4.jpg

Siglo III a.C: Una Roma feliz. Cáp. II de III. Por Tostadora

Siglo III a.C: Una Roma feliz. Cáp. II de III. Por Tostadora

         Conversaciones como la del capítulo I o muchas parecidas debieron tener lugar en Roma en 216 a.C. Pero permitidme que antes de continuar con el diálogo entre Publio y Graco –personajes totalmente ficticios- os ponga un poco en situación…

          Los conflictos entre romanos y cartagineses se remontan como mínimo al año 264 a.C, fecha de la Primera Guerra Púnica. En aquella época es cuando Roma comenzaba a comprobar los beneficios de la guerra. La famosa “pax romana” siempre supuso una utopía en un pueblo –luego un imperio-  cuyo principal motor de la sociedad, y prácticamente el único, era la guerra. Cada vez que Roma entraba en combate, un enorme número de recursos se movilizaban. Pero no penséis que al igual que en los demás pueblos e imperios de la época. No. La única posibilidad para Roma era ganar la guerra. No había una segunda opción, ni un plan B, ni una alternativa. La guerra se ganaba, y punto. Tan sencillo como eso. Como no se permitían otra cosa, su sociedad se estructuraba de forma que permitiese guerras costosísimas durante años y años sin que la economía se resintiese especialmente.  

          Por ejemplo, el servicio militar duraba 20 años, con posibilidad de renovar el contrato, a su término, por otros 20. ¿Por qué? Supongamos que un joven de 18 años decide dedicarse al noble arte del ejercicio militar. Él sale de su casa un soleado día de primavera, coge su petate, se despide de su padre, de su madre y de los 18 dioses inventados por la familia cuyas figuritas están colocadas al lado de puerta. Dirige sus pasos hacia el cuartel más próximo y pregunta al guardia que custodia la puerta dónde puede alistarse. Siguiendo sus instrucciones, se acerca a una cola esperando su turno para decirle su nombre –pongamos… ¿Obdulio Augusto?- a una especie de funcionario. ¿Ave, que desea? Alistarme como legionario, ¿Nombre? Obdulio Augusto, ¿Edad? 18 años, De acuerdo, pase al fondo a la izquierda al vestuario y cámbiese, Oh, si claro, pero… ¿podría decirme contra quién guerreamos hoy? Pues hoy toca contra Cartago, chico, ¿Y cuál es el motivo de la disputa? Pues la Manzana de la Discordia, ¿Cómo? Sicilia chico, Sicilia, ¡Ah, Sicilia!

          Pues el chico se iba a guerrear contra los cartagineses para conseguir los territorios de la Manzana de la Discordia –así llamada en referencia a la de enfrentamientos que la islita de marras ha provocado durante siglos- excelentemente adiestrado. Durante esos años de batallas, los romanos iban haciendo prisioneros –no siempre, porque a ellos lo que de verdad les ponía era exterminar-, y esos prisioneros se convertían en esclavos, y los esclavos eran enviados a Roma. ¿Y que hacían en Roma? Pues de todo, pero principalmente trabajar.

          Han pasado unos cuantos años, la guerra púnica ha terminado, y he aquí a nuestro héroe, el -ahora- Decurión Obdulio Augusto, que vuelve a su hogar, Roma, la ciudad más poderosa del universo, después de zurrarle la badana –¿que demonios significará eso?- a los cartagineses. Pero cuál es su asombro cuando descubre que en su ciudad, su casa, habita esa raza a la que ha aprendido a despreciar durante los años de servicio militar. ¿Cómo? ¿Qué ahora tengo que convivir con estos esclavos, con esta raza, que nuestro ejército ha demostrado sobradamente que no es comparable a la nuestra, la romana? Bueno, al menos podré escupirles en la cara cada vez que me venga en gana.

          Y es en este momento cuando descubrimos cómo Roma se ha convertido en la mayor maquinaria de guerra jamás conocida. Ahora mismo, Obdulio Augusto, cuenta con que todavía pertenece a la Legión. Tiene un trabajo remunerado, y lo seguirá tenido durante mucho tiempo hasta que se retire, momento en el cual el estado le proporcionará una pensión vitalicia –se solía dar en forma de tierras- con la que pasará el resto de sus romanos días… (Esto se puede ver en "Astérix y el regalo del César").

          ¿Cómo, que no habéis entendido por qué Roma se ha convertido en la mayor potencia militar de todo el mundo antiguo? Pensad… pensad en cualquier guerrero del mundo antiguo: en un íbero, en un celta, en un seleúcida… Cuando uno de éstos cazurros vuelve a casa después de guerrear durante unos años pues se tiene que buscar las habichuelas como buenamente pueda. Como agricultor, ganadero o herrero, o trabaja o no come. Imaginaos que nuestro Obdulio vuelve sin su futuro laboral despejado como ahora. Llega a Roma y la guerra ha sido victoriosa –como siempre-, por lo que cantidades ingentes y obscenas de esclavos aran las tierras romanas, las cultivan, crían los carneros y matan a los cerdos, amamantan a los bebes romanos y hacen lo propio con sus padres, se matan en los juegos circenses, hacen las compras de sus amos… Y lo mejor de todo ¡GRATIS!

          ¿A dónde va a parar Obdulio? Pues al paro… a vivir como buenamente pueda. Porque por muy patrióticos que fueran los romanos, si tienen mano de obra gratis no van a despreciarla por contratar a un romano de pro. ¿Qué supondría esto? Pues dejar de hacer prisioneros para luego utilizarlos como esclavos, aunque sean una magnífica mano de obra, para evitar la regresión en todos los aspectos que ocasionaría el hecho de que la gran mayoría de los hombres jóvenes del imperio se muriera de hambre. Porque si los esclavos siguen aumentando, la población en edad de procrear disminuirá debido a la precaria situación económica que sufrirían al no poder competir con los extranjeros para cpnseguir un trabajo, la natalidad bajaría entonces, provocando un retroceso en la población que a su vez desencadenaría en un envejecimiento progresivo de la sociedad  y en una crisis de proporciones colosales que abocaría a la desaparición del pueblo romano.

         ¿Pero cómo despreciar las virtudes de la esclavitud ahora? Ya nos hemos acostumbrado, dirán los romanos. Nos hacen la vida muy fácil y agradable y, además, no hablemos del juego que dan en la alcoba…. Por esto los romanos comenzaron a componer una sociedad basada en la esclavitud, donde ésta se dedicaría a hacer todo aquello que a un romano no le apetece (¿No os recuerdan a los entrañables Épsilon de Huxley?). ¿Cómo conseguimos los esclavos? Pues guerreando. ¿Y quienes guerrearán? Pues los jóvenes que no provengan de una familia rica –es decir, la gran mayoría-, porque los ricos ponen el dinero para la guerra.

         Después de esto, nos queda así la sociedad: Una élite basada en la riqueza que gobierna y legisla sobre el resto y que se dedica a vivir la vida, a patrocinar guerras y a recibir réditos muy superiores a lo invertido, un gran número de esclavos que mantiene en funcionamiento un imperio cada vez más grande, y millones de hombres jóvenes que se dedican a conquistar el mundo en nombre de Roma, consiguiendo más esclavos para unas fronteras cada vez mayores. Es un círculo vicioso perfecto (O un círculo virtuoso como diría Laporta). La gran cantidad de esclavos permite que haya un gran número de ciudadanos sin nada mejor que hacer que alistarse al ejército. Las vastas legiones romanas proporcionan numerosas victorias, riquezas y –lo más importante- esclavos que retroalimentan el sistema. Un sistema perfecto que conforme más crezca, más infalible será. Un imperio indestructible, al que solo un loco podría osar enfrentarse de tu a tu. 

         Pues es aquí donde entra Aníbal Barca…      

Siglo III a.C: Después de Cannas. Cáp I de III. Por Tostadora

Siglo III a.C: Después de Cannas. Cáp I de III.  Por Tostadora

            -La guerra solo es bella para los que no luchan, Publio. ¿Habiendo combatido en las legiones del César como te atreves siquiera a discutirlo? Respóndeme a esto entonces: ¿Cómo puede ser bello el sonido de una espada atravesando un estómago y desparramando sus intestinos? ¿Cuál es la atracción que te provoca el sonido del crepitar de los huesos de tus hermanos al ser golpeados con una bola de hierro? ¿Cómo puede existir belleza en el olor de una montaña de cadáveres que resbalan bajo tus pies? ¿O es que acaso encontrasteis a Venus paseando por Cannas? -dijo Graco-.            

             -No vi a Venus, Cayo Graco. Vi al mismo Marte luchar. Su piel es negra y grandes sus manos. Su voz es un trueno en la noche, incluso en el campo de batalla. Era, sin duda, un Dios. Cuando los vélites nos dejaron paso a nosotros, la infantería, su gesto apenas cambió. ¿Cómo puede un mortal permanecer imperturbable ante el ejército más poderoso creado nunca?¡Un ejército cuya única misión era exterminarlo! ¿Cómo puede la duda huir de su rostro?  Incluso el mismo Heracles hubiera vacilado.            

             -¿Y qué hizo, entonces, tu Dios?            

             -Cuando cargamos no se inmutó. De su garganta no escapó ni el más insignificante sonido. El primero en llegar a donde él se encontraba fue Cornelio.            

             -¿Cómo murió?                        

             -Fue rápido. La espada de Anibal atravesó su garganta. La hoja cruzó el cuello por completo. Cuando la sacó, la sangre de Cornelio comenzó a brotar. Intentó taparse la herida con las manos. No soy capaz de imaginar lo que debió sentir cuando comprobó que podía introducirlas casi por completo dentro de la herida.            

             -Deberías beber algo, Publio.

            -Gracias, Graco –dijo, mientras se servía licor de Caledonia-. Casi todos los que iniciaron la carga murieron al instante. Recuerdo ver miembros humanos caer del cielo. Esos bastardos, cuando arrancaban un brazo o una pierna, los lanzaban contra nosotros. Algunos de ellos no querían matarnos, sino únicamente mutilarnos para amedrentar al resto con nuestros cuerpos destrozados.  

             -¿Y de donde emana la belleza de la que me has hablado? 

             -De la perfección. Participé en la batalla perfecta. 

             -Pero estabas en el bando equivocado. Supongo que eso no te parecería tan hermoso. 

             -La perfección es en sí bella. Aunque lo perfecto sea terrible, un individuo –y más un romano- debe saber percibirla. La naturaleza es bella porque es perfecta. 

             -No lo creo, la naturaleza es bella porque es pura. 

             -Exacto y la perfección emerge de la pureza. Por eso creo que perderemos esta guerra. Si Aníbal ha logrado la perfección en la guerra, es porque sus motivaciones, o quizás su espíritu, es puro. Y cuando las almas son puras, es imposible luchar contra ellas. 

             -Publio, ahórrate tus opiniones. No puedo escribir eso en mi informe para el Senado. Te condenarían a galeras. Céntrate en explicarme cómo, después de comenzar el ataque, si no cometisteis ningún error, os pudieron masacrar de forma tan humillante. Y te aconsejo que lo hagas bien. Roma pide sangre y, si no es la de Anibal, será la de los pocos que sobrevivisteis. 

            -Pasaba el tiempo y sus soldados parecían flaquear, comenzaron a retroceder. Él con su mera presencia consiguió que la línea no se quebrase. No eran grandes guerreros, al menos no mejores que nosotros, pero no pudimos resquebrajar su defensa, no sabíamos como hacerlo. Había cuatro romanos por cada cartaginés, nos relevábamos para poder descansar, pero jamás estuvimos siquiera cerca de conseguirlo. De pronto escuché un cuerno númida. Fue aterrador, era como escuchar a los espíritus de la guerra viniendo desde el reino de Hades. La caballería de Anibal debía de haber sido aniquilada. Todavía no sé muy bien qué fue lo que ocurrió. Era imposible que la caballería cartaginesa venciera tan fácilmente a la nuestra…  

Jimi Hendrix - Flying on Little Wing. Por Egeria.

Jimi Hendrix - Flying on Little Wing. Por Egeria.

      · Hace poco que Tostadora y yo hemos empezado a tocar la guitarra y, claro, dado nuestro carácter obsesivo-compulsivo pasamos una considerable cantidad de tiempo en busca de referentes. Y quién mejor que James Marshall Hendrix (1942-1970) para iniciar nuestra sección de música. 

 

      · Cada momento de la Historia está definido por los hechos que ocurrieron en él, pero sólo puede entenderse realmente conociendo su arte - aunque, de forma increíble, en ciertos planes de estudio universitarios hayan tenido la coherente idea de separar la carrera de Historia en "historia" e "historia del arte" -. Si damos esto por válido es imposible entender la década de los 60 sin Jimi Hendrix tocando de rodillas una guitarra ardiendo sobre el escenario. Simplemente, el sentimiento de millones de estadounidenses ante la barbarie de Vietnam no se comprendería sin las notas desgarradas del Himno americano (Star-spangled Banner) sonando sobre las tablas del Woodstock en 1969.

 

      · Jimi murió joven con casi 28 años en septiembre de 1970, el mismo año en que murió Janis Joplin (1943-1970) y un año antes de la muerte de Jim Morrison (1943-1971). Parece que en una época en la que la música estaba estrechamente relacionada con el consumo excesivo de LSD, el precio del talento era una muerte temprana. El hecho es que ellos con su música dieron forma a los 60, engrandeciendo un trozo de Historia que, lamentablemente por sus hechos, no estuvo a la altura de su arte. 

 

      · Aquí dejo el video y la letra de la canción que más me ha marcado de Hendrix. Es Little Wing del Album  Axis: Bold as Love.

 

 

  • LITTLE WING

 

Well shes walking through the clouds
With a circus mind thats running round
Butterflies and zebras
And moonbeams and fairy tales
Thats all she ever thinks about
Riding with the wind.


When Im sad, she comes to me
With a thousand smiles, she gives to me free
Its alright she says its alright
Take anything you want from me, anything
Anything.


Fly on little wing,
Yeah yeah, yeah, little wing

 

Quoth the raven: Lost in translation. Por Tostadora

Quoth the raven: Lost in translation. Por Tostadora

Si se hiciera una encuesta entre los aficionados a las narraciones de Edgar Allan Poe, sobre cual de todas sus creaciones es la más excepcional, una abrumadora mayoría respondería “El Cuervo”. Bueno, pues no conozco a nadie con menos de treinta años que se haya leído “El Cuervo” en este país. No me refiero a que a los jóvenes no les interese la obra de Poe, sino que los que se hayan acercado a ella lo habrán hecho en vano. ¿Por qué? Pues es muy sencillo: por los traductores de hoy en día.

Hay una larguísima serie de calificativos que muchos de ellos merecen (como por ejemplo: “malditos hijos de colipoterra”) pero me voy a abstener de enumerarlos, ya que pienso invertir todo ese tiempo en escribir la ÚNICA traducción (he revisado decenas) en español que merece realmente la pena, realizada por Julio Gómez de la Serna hace más de cuarenta años. Más adelante pondré el original en inglés.

 

Que disfrutéis:

 

EL CUERVO

 

Una vez, en triste medianoche,

Cuando, cansado y mustio, examinaba

Infolios raros de olvidada ciencia,

Mientras cabeceaba adormecido,

Oí de pronto que alguien golpeaba

En mi puerta, llamando suavemente.

“Es, sin duda -murmuré-, un visitante…”

            Solo esto, y nada más.

 

Recuerdo el mes helado de diciembre;

Una a una, las ascuas moribundas

Forjaban su espíritu sobre el suelo.

Deseaba con ansia la mañana,

Buscando entre mis libros un consuelo

A la doliente pérdida de la virgen Leonora,

Que es así por los ángeles llamada.

            Sin nombre aquí, para siempre.

 

Me estremeció el crujir de las cortinas

De púrpura y de seda, y un espanto

Jamás sentido paralizó de pronto

Mi corazón. Y yo me repetía:

“Algún tardío visitante ruega

La entrada, en la puerta de mi estancia

En mi puerta golpea un visitante:

Es esto y nada más.”

 

Reanimada mi alma y sin más dudas,

“Señor-dije-, o señora, si no,

Vuestro perdón sinceramente imploro.

Pero es que dormitaba, y la llamada

Vuestra fue tan leve, que apenas

Supe si había oído tal llamada.”

Abrí entonces la puerta por completo;

            Tinieblas, nada más.

En lo oscuro atisbaba con ahínco.

Temor, asombro y dudas me invadían;

Soñaba sueños que ningún viviente

Oso nunca soñar. Todo seguía

Envuelto en el silencio y en la calma.

Una sola palabra murmuraba,

Y el eco, aquel “¡Leonora!”, murmuraba.

            Solo esto, y nada más.

 

Volví a mi estancia; ardía mi alma entera.

Pronto se oyó de nuevo la llamada,

Pero esta vez más fuerte, más cercana.

“¿Será -dije- ese ruido en la ventana?”

Semejante misterio he de explorar,

Calmando el corazón; ese misterio

He de explorar, repito, en las tinieblas;

            El viento es, nada más.

 

Abrí el postigo, y con gentil revuelo,

Entró entonces un cuervo majestuoso,

Como en los santos días del pasado.

No me hizo reverencia, ni siquiera

Un minuto vaciló. Con prestancia

De dama o varón noble, se posó

En el dintel, sobre un busto de Palas…

            Allí quedó posado, y nada más.

 

Con su grave decoro el feo pájaro,

Como el ébano negro, mi tristeza

En sonrisa trocó. Y yo le dije:

“A pesar de tu cresta desollada,

Cobarde no eres, ciertamente, cuervo

Torvo, espectral, errando por el margen

De la noche Plutónica. ¡Revélame tu nombre!”

            El cuervo dijo: “Nunca más”

 

Atónito quedé por la respuesta

Tan rotunda del ave desgarbada,

Respuesta inoportuna, sin sentido;

Mas convengamos que ningún mortal

Haya nunca gozado la fortuna,

De tener sobre un busto, en el dintel

De su puerta, un pájaro posado,

            Con un nombre como este: “Nunca más.”

 

El cuervo solitario, desde el busto,

Una sola palabra pronunció,

Como si su alma fluyese en vocablo.

Calló después, inmóvil el plumaje.

Yo apenas susurré: “Otros amigos

Volaron ya. Cuando despunte el alba,

Este me dejará sin esperanza…”

            El ave dijo entonces: “Nunca más.”

 

Estremecido estaba por la calma

que truncara su rápida respuesta.

“Sin duda –dije-, son esas palabras

Las únicas que sabe y ha aprendido

De un amo desdichado a quien persigue

El desastre fatal, y cuyo canto tenga este estribillo triste:

            “Nunca más, nunca más.”

 

Pero el cuervo seguía e incitaba

Mi alma a la sonrisa todavía.

Un sillón puse, frente al busto, al ave;

Y hundido en almohadón de terciopelo,

Mi mente encadenaba fantasías,

Pensando en lo que el ave desmañada,

Fea, flaca, siniestra, a entender daba

            Croando: “Nunca más.”

 

Sentado meditaba. La mirada del pájaro

Quemaba mi corazón.

Recliné la cabeza en el cojín

Que la luz de la lámpara embebía,

Deleitada en el suave terciopelo,

Pero ese cojín color violado

Ella no ha de oprimir ya más,

            ¡ah, nunca más!

 

Se tornó el aire denso y perfumado

Por invisible incienso. Balanceaba

El incensario un serafín; se oían

Sobre el tapiz mullido sus pisadas. Grité:

“¡Miserable! ¿Te ha prestado tu Dios

o el nepentés, te envía con sus ángeles?

¡Bébelo, olvida ya a Leonora!”

            El cuervo dijo: “Nunca más”

 

“¡Profeta –dije-, ser nacido del mal!

¡Profeta, sí, o pájaro, o demonio!

Si el tentador te manda, o la borrasca

Te arroja a nuestra orilla desolada

Pero impávida, a la desierta tierra

mágica por el terror,

dime, yo te lo ruego, ¿hay bálsamo en Galaad?

            El cuervo dijo: “Nunca más.”

 

“¡Profeta –dije-, ser nacido del mal!

¡Profeta, sí, o pájaro, o demonio!

Por ese cielo que en lo alto se comba,

Por ese Dios que tú y yo veneramos,

Di a esta alma triste si en el Edén distante

Abrazará a la doncella santa

A quien los ángeles llaman Leonora.”

            El cuervo dijo: “Nunca más.”

 

“¡Que se esta palabra la señal,

Pájaro o espíritu diabólico,

De nuestro adiós! ¡Retorna en la borrasca

Y al borde de la Noche Plutoniana!

¡No dejes pluma negra como prenda

De tu mentira! Mi soledad respeta,

¡quita de mi pecho tu pico, tu forma de mi puerta!

            El cuervo dijo: “Nunca más.”

 

El cuervo, inmóvil, sigue aún posado

sobre el pálido busto de Atenea,

encima de la puerta de mi estancia;

sus ojos son de un demonio que sueña.

La luz sobre él mi lámpara derrama

Proyectando su sombra por el suelo.

Y mi alma fuera de esa flotante sobra,

            ¡nunca más se alzará!

   

Un poquito de historia. 3...2...1...¡acción!

Un poquito de historia. 3...2...1...¡acción!

En 1904, el matemático francés Henri Poincaré (1854-1912) conjeturó que el resultado obtenido para la esfera n=2 del espacio de dimensión 3 tenía un análogo para la esfera n=3 del espacio de dimensión 4. En otras palabras, en el espacio de dimensión 4, toda variedad de dimensión n=3, cerrada y simplemente conexa, sería homeomorfa a la esfera de dimensión n=3. Pero Poincaré no consiguió probar su conjetura. Tampoco ninguno de sus contemporáneos ni sucesores. Con el tiempo, la conjetura de Poincaré cobró interés hasta convertirse en el problema abierto más notable de la Topología Geométrica, con destacables implicaciones para la Física. Más aún, llegó a convertirse en uno de los problemas sin resolver más importantes de la Matemática.

Para n=1 la conjetura es trivial y para n=2 ya fue demostrada en el siglo XIX. Para n=5, hubo de esperar hasta 1961, cuando lo hizo Erik Christopher Zeeman. Ese mismo año, Stephen Smale lo consiguió para n igual o mayor que 7 y, en 1962, John R. Stallings para el caso n=6. Los casos n=3 y n=4 se resistían y hubo que esperar a 1986 cuando, en lo que se consideró una hazaña matemática del estadounidense Michael Hartley Freedman, se consiguió demostrar el caso n=4. El problema es que, resuelto con éxito para todas las demás dimensiones, el caso original n=3, planteado por Poincaré, se resistía denodadamente a cualquier demostración matemática hasta que Grigori Perelman hizo pública su demostración.

Henri Poincaré estableció dicha conjetura en 1904, indicando que la esfera tridimensional era única y que ninguna de las otras variedades tridimensionales compartían sus propiedades.